domingo, 20 de octubre de 2013

I DUATLÓN EL PICÓN

El pasado fin de semana dije que el Triatlón de Santander iba a ser la última carrera de la Temporada, pero mentí... aún quedaba la mejor, la prueba más emotiva del año y a la que más ganas tenía: El duatlón popular del Picón.

¿Y qué tiene de especial este duatlón? Pues que en él iba a debutar Vanesa, la única persona que junto a mis padres no se había perdido ni una de mis carreras. Para mí fue como un regalo cuando tras finalizar el Triatlón de Comillas me dijo: "Consígueme una bici que voy a correr un duatlón" .  No me lo podía creer, me hizo una ilusión tan grande que desde entonces tenía la fecha 19 de Octubre marcada en el calendario.
El objetivo era más que claro, disfrutar al máximo de esta oportunidad de correr con ella y acompañarla en su primera aventura duatlética. 



  El día antes de la carrera se subió por primera vez en una bici de carretera que Cobo le había prestado. Dimos unas pedaladas a última hora para que tuviera al menos una toma de contacto con esta bici. No fue fácil adaptarse, pero la vi preparada para, al menos, terminar dignamente la carrera.



Así que al día siguientes nos plantamos en el parque del Picón de Zurita de Piélagos, junto a más de 120 corredores, muchos de ellos populares. El día prometía mucho, y no tener los nervios de los últimos triatlones en los que me jugaba el Circuito también me ayudó a disfrutar aún más del ambiente. Pero como todo no podía ser un camino de rosas pronto llegó el primer contratiempo, cuando al sacar la bici del coche veo que tengo el tubular trasero pinchado... ¡Qué faena! Por suerte, el líquido antipinchazos  consiguió sellar, más o menos, el agujero y meterle a la rueda hasta 5 kilos de presión, suficientes para aguantar los 9,4 kms de bici.

Fueron los niños quienes entraron en competición primero y fue una pasada verles disfrutar del deporte y sus caras de satisfacción cuando les aplaudíamos los mayores.

Vanesa estaba tranquila, aparentemente, y confiada en poder terminar, vistos los buenos entrenamientos que hizo las semanas previas. Miramos la lista de inscritos y había 17 chicas apuntadas, así que un Top 10 era un objetivo realista. Metimos las cosas en boxes y nos pusimos a calentar con Omar e Ibarguren hasta que Fede nos fue llamando a la salida.



Por delante 3,5 kms de carrera a pie, 9,4 kms de bici y 1,5 kms de carrera a pie. Nos colocamos en mitad de pelotón y arrancamos. Salimos a buen ritmo, aproximadamente a 4:10' min/km, y durante el primer km nos movimos en la zona media- trasera del pelotón. Poco tardamos en recuperar posiciones, y fuimos avanzando puestos durante todo el primer sector, siguiendo muy de cerca a Cristina Ruíz, tercera en ese momento. 



Vanesa iba bastante bien así que le animé para que apretara un poco, terminando este primer sector a una media de algo menos de 4:30 min el km y con la sensación de haber guardado fuerzas.
Mira que yo estaba preocupado por la transición, porque siempre que corres tu primera carrera cuesta hacer una cambio rápido, pues no sé si Vanesa lo estuvo practicando o qué pero hizo la transición más rápida que yo y me sacó unos metros en el inicio de la bici. Me estaba dejando ALUCINADO, parecía que llevaba toda la vida corriendo duatlones.



Me pongo delante de ella para marcarle las curvas y servirle de referencia, consciente de que este sector era el más delicado por la falta de práctica. No obstante, nada más pasarla me dice ¡dale dale, sigue a Cristina! (lo siento Cris por la chapa que te dimos durante la carrera jeje). Las tres vueltas de las que constaba el sector estaban llenas de curvas de 90 grados, y aquí fue donde nos encontramos con el mayor problema: el miedo de Vanesa  a girar, que provocó que en la primera de las curvas se hiciera una excursión por la hierba sin consecuencias. Había que tener cuidado con los que nos doblaban, ya que la carretera era estrecha. Por delante Cristina impuso su experiencia sobre la bici y se escapó, mientras Vanesa cada vez se atrevía a pillar las curvas más rápido. 


Adelantamos a algún corredor incluso, y cuando teníamos a la vista a Marta, uno de los grupos de cabeza de carrera pasó a Vanesa tan rápido que se asustó, no giró en la curva y ¡ZAS! se fue contra la furgoneta que estaba aparcada en la cuneta. Me di la vuelta preocupado pero la veo que se levanta con rabia, así que me tranquilizo ¿estás bien? me dice que sí, pero la cadena de la bici se había salido, haciéndonos perder unos minutillos.

Todos a los que habíamos adelantado nos volvieron a pasar, pero en la vuelta y media que quedaba recuperamos algún puesto. Frenando en las curvas como si no hubiera un mañana y apretando en las rectas llegamos a boxes para afrontar los 1,5 kms de carrera a pie que faltaban. Pero...¿cuál fue la sorpresa? Pues que a Vanesa le habían quitado el sitio para dejar la bici, teniendo que cederle yo el mío. Y de nuevo transición rapidísima la suya, mientras yo deambulaba por los boxes en busca de un sitio para mi bici... a esto sí que no estaba acostumbrado jeje. Cuando por fin vi un hueco y pude dejar la bici, Vanesa ya me sacaba 300 metros, así que arranqué rápido para pillarla y llegar juntos a meta. La carrera a pie que discurría por un sendero del parque del Picón me recordó a los crosses de mi época de atleta, con las cintas que delimitan el trazado atadas a los árboles. Llegué donde Vanesa, que en ese momento iba 6ª chica pero a punto de pillar a Nuria Aja, que era la 5ª.



Apretando en el último kilómetro dimos caza a Nuria y a muy buen ritmo encaramos la última recta con el arco de meta al fondo, entrando de la mano en los puestos 99 (Vanesa) y 100 (yo) de un total de más de 120 participantes. Pero lo mejor de todo estaba por llegar cuando nos enteramos que había quedado la 5ª chica ABSOLUTA.



Este hecho le permitió subir al podium y recibir un merecidísimo trofeo, un búho, como no, y una medalla que ahora tengo yo en mi poder ;). ¡Mejor imposible!  Carrerón que se marcó pese a no haber cogido nunca una bici de carretera y ser su primera carrera.  Por la felicidad que desbordaba tras la misma, creo que no va a ser la última.
El buen ambiente acompañado del buen tiempo hizo más amena la espera hasta la entrega de trofeos. Además, se sortearon regalos y a Vanesa le tocó una comida para dos personas en un restaurante de Renedo.
En cuanto a mí, que puedo decir... que no me cabía el orgullo en el pecho al verla subida en el podium. Me hizo más ilusión que cualquier podium mío. Sin duda el colofón perfecto para terminar el mejor año deportivo de mi vida.
GRACIAS! :)



PD: quiero dar la enhorabuena a Patricia, por su primera victoria en duatlón, y por alegrarse tanto de la carrera de Vanesa. También quiero dar la enhorabuena a Marta por ese 4º puesto, siendo también su debut en duatlón ya Cris por un nuevo podium, otro más en una temporada increíble. En cuanto a la participación masculina, la victoria fue para Victor González Ruíz (Polanco), mientras que David y Jose,  mis compañeros de entrenamiento, se colaron 6º y 12º. ¡Enhorabuena a todos ellos!



Fotos cortesía de Cristina Ruíz. Muchas gracias! ;)

domingo, 13 de octubre de 2013

XXIV TRIATLÓN DE SANTANDER

La vigésimo primera de muchas...

No sé cómo empezar la crónica de ésta última prueba del año cargada de emociones y en la que me he visto más arropado que nunca. Quizás se me haya pasado por la cabeza si merece la pena todo esto, los duros entrenos en solitario, el día a día, las veces que tienes que decir que no a quedadas con amigos porque al día siguiente tienes carrera... Pero hoy, 13 de Octubre de 2013, he vivido en el Triatlón de Santander la carrera más emotiva de mi vida, la carrera en la que me he dado cuenta de la cantidad de amigos que tengo, de su apoyo incondicional y su paciencia y de la grandeza de este deporte. Por ello quiero dedicar este esfuerzo a todos los que habéis remado hoy conmigo, habéis pedaleado hoy conmigo y habéis corrido al límite conmigo, llevándome en volandas desde el primer metro hasta el último ¡Va por vosotros!






No pudo ser, me tengo que conformar con el subcampeonato del Circuito Caja Cantabria de Triatlón. Tras 6 pruebas Felipe Santamaría ha impuesto su calidad y es el justo vencedor, así que no me queda nada más que darle la enhorabuena y sentirme orgulloso de haber plantado cara a todo un SEÑOR del triatlón.

Empezando con la crónica, a eso de las 10 de la mañana ya andaba yo por el Sardinero concentrado para la última cita del año. Volvía a portar el dorsal Nº1 de líder aunque sabía de la dificultad de mantenerlo frente al poderío de Felipe. Ya antes de la carrera llegué a emocionarme al ver el despliegue de aficionados que iba a tener. Familiares y amigos se habían volcado hoy conmigo, animando en cada momento, incluso con pancartas (Nacio, esta vez te has pasado, muchas gracias).


Preparamos las cosas en boxes con minuciosidad, cuidando cada detalle para que todo saliera rodado, y con algo de retraso nos fuimos acercando hasta la salida, en Piquío. Al contrario de lo que suele suceder en Cantabria, esta vez organizaron la salida por orden de dorsal, por tanto me colocaron el primero, enfocando de frente  la primera boya.


 Al dar la salida arranco rápido por la arena y me tiro el primero al agua... ¡Madre mía la que me viene encima! La primera boya estaba cerca y la paso de los primeros y sin golpes. Intento no calentarme y coger buenos pies en el largo paralelo a la playa hasta la segunda boya. Me encuentro bien y aprieto a muerte. A penas me adelanta gente en la segunda parte del sector, y consigo avanzar hacia delante. No sé en qué puesto voy pero sé que bastante bien.



 Salgo del agua y oigo que Felipe está a unos 30 segundos. Corro por la arena del Sardinero como un pollo sin cabeza y entro en boxes a toda leche. Miro a mi alrededor y veo a Alberto Ruíz y a Emilio Alonso del Buelna. Salgo en bici poco detrás de Emilio y con Berto a rueda. Me pongo a tirar, sin contemplaciones, dando alcance a Emilio y a otros triatletas que se habían descolgado del grupo de cabeza.


Durante las dos primeras vueltas voy tirando yo como un poseso para evitar que el grupo de cabeza, donde iban Jaime, Sergio Correa, Guillermo Ruíz, Mario Arias y Felipe, se escape demasiado. Pero poco a poco voy pagando el esfuerzo y veo que yo solo no puedo hacer nada.


En la segunda vuelta somos neutralizados por un gran grupo de unos 20 triatletas, donde al principio Fernando García Aja se pone a tirar intentando echarme un cable. Manzaneda,  del Santander y Carlos Jirout, del Academia Civil, también pasan al relevo. Yo voy muy justo por el esfuerzo de las dos primeras vueltas, pero paso a tirar lo que puedo. No obstante, a partir de la tercera vuelta empieza lo que no quería que empezase... los ataques. Y el grupo se vuelve loco, sucediéndose cada poco hachazos a los que tengo que salir, petándome las piernas e impidiéndome ir a ritmo. Se me estaba escapando el Circuito, Felipe ya estaba a más de 1' 30'' y no podía hacer nada, perdido entre hombres del Buelna y del Santander.
En los últimos metros antes de boxes aprietan todos para coger posición. Intento hacerlo pero no tengo piernas, así que llego al cambio en mitad de pelotón.


Me pongo las zapatillas con alguna dificultad y a muerte a por los 5 kms que quedan. Me cantan 2' 10'' con Felipe al empezar a correr... La cosa va a estar casi imposible, pero que no sea por no intentarlo. Salgo fuerte los primeros metros detrás de Edu y superando a todos los de mi grupo de bici antes de llegar al primer cono. 


A los 400 metros de carrera a pie descuelgo a Edu e inicio una persecución suicida a por los de delante. Voy al límite, no sabía si iba a petar, pero me daba igual, había que intentarlo. Cada vez que me cruzaba con los tres primeros (Jaime, Sergio y Felipe) veía que les iba recortando mucho terreno. Los ánimos del público también ayudan a no bajar el ritmo en cada vuelta.  A falta de 1500 metros me cantan menos de un minuto con Felipe... pufff.... sigo tirando y adelanto a Guillermo Ruíz. Giro en el último cono y con la meta a 200 metros veo ya imposible llegar hasta Felipe y me relajo, entrando en 5ª posición en meta (finalmente 4º por la sanción de 2' a Jaime, que había sido el claro y merecido vencedor de esta carrera).


Con esta carrera consigo el Subcampeonato del Circuito de Caja Cantabria, cuyo pódium queda de la siguiente manera:
1º Felipe Santamaría
2º Pelayo Menéndez
3º Guillermo Ruíz

Los tres primeros del Circuito Caja Cantabria de Triatlón 2013 y Sergio Correa
No quiero pasar sin felicitar a este último por el final de temporada que ha hecho, sé que lo pasó mal después de Bilbao pero supo superarse a sí mismo y estar ahí adelante en todas las carreras. Muchas felicidades Min, el año que viene con ganas e ilusión de nuevo volveremos a enfrentarnos.
Con Felipe, campeón absoluto del Circuito Caja Cantabria de Triatlón 2013

Y se ha acabado... sí, parece que fue ayer cuando empezó la temporada con el Tri Blanco de Reinosa. Un gran año que intentaré resumir en la próxima entrada del blog. También quiero dedicar una entrada a agradecer a todas esa gente que me ha apoyado... es más, me adelanto dando las gracias a mis padres y a Vanesa por estar ahí SIEMPRE, haga frío, haga calor, llueva, nieve o granice, siempre ahí conmigo, siendo mi bastón en los momentos malos y mi máximo apoyo en los buenos MIL GRACIAS por vuestra paciencia infinita.
De cara al próximo año me gustaría dar un salto de calidad en el agua, que es donde se me están yendo las carreras. Creo que mejorando en este sector puedo empezar a meterme en podiums más frecuentemente... veremos qué pasa.


Y con el grito de guerra de mis hermanos espartanos me despido AHUUUUUU!!!!!!! ;)

Muchas gracias a Begoña, Fran, Nacho, Cris y Gustavo por las fotos.

lunes, 7 de octubre de 2013

V TRIATLÓN SAN VICENTE DE LA BARQUERA

El 20º de muchos...

Penúltima prueba del Circuito Caja Cantabria de triatlón sobre distancia sprint y con drafting (750m, 20km, 5km). La temporada se acaba y la pelea por el circuito se apreta. Antes de la carrera éramos 3 los candidatos al triunfo en la general: Felipe Santamaría, Guillermo Ruiz y yo mismo, tres prototipos de triatleta muy distintos: ciclista, nadador y atleta. Este hecho hace que se mantenga la emoción hasta el final y no haya nada decidido hasta el último metro.

Llegué con tiempo a San Vicente, pagué la inscripción, hablé con unos y con otros, me tatué el número y a boxes. El día era idílico para la práctica del triatlón, con 22 grados y sol. Me metí al agua a calentar y las sensaciones eran buenas. La estrategia en la natación la tenía clara, tirar a tope y salir lo más alante posible, sabiendo de lo difícil que era salir con Felipe, aún soñaba con ello o por lo menos salir con un buen grupo de bici.



A las 18:00h se dio la salida y nos tiramos como locos a devorar las templadas aguas de la ría. Salí fuerte por la izquierda y a los 200 metros vi que iba entre los primeros. Mantuve la posición hasta la primera boya donde empecé a petar un poco. Pufff y lo que nos queda... Puse mi marcheta y me agarré a los pies de alguien como pude, pero los brazos se habían saturado en los primeros metros y cedo antes de girar la tercera boya y encarar la rampa del puerto hacia los boxes. No obstante salgo del agua en buena posición, entre los 15 primeros. Ahora solo tocaba rezar para que en mi grupo de bici hubiera alguien con interés de tirar hacia delante.



Mientras hacía el cambio oigo por megafonía que Felipe está saliendo de boxes con la bici ¡mierda! esos 30 segundos perdidos en el agua, aunque fueron menos de lo que pensaba, sirvieron para decantar la carrera de su lado. Con los ánimos de mis padres, mi novia y amigos que veían la carrera me subí en la flaca, agaché la cabeza y empecé a darle.



 Iba solo tirando hasta que a mitad de subida me pilla el grupo de Sobrino, Manzaneda y Marcos... Mala señal, Felipe tenía a sus compañeros de equiipo conmigo en bici que, como es lógico, no me iban a pasar ni un relevo. Coronamos y Sobrino y Manzaneda tomaron la iniciativa, mientras yo me iba recuperando para poder ponerme a tirar. En la ida tiré siempre que pude del grupo, mis intereses estaban por delante y no podía perder un metro. En nuestra persecución recogimos por el camino a Javi Rumayor , Berto y Emilio Alonso (voy a soñar con los de amarillo esta semana... jeje), quienes, salvo un relevo de Ruma y alguno del sub 23 Pello Osoro, se mantuvieron en cola de grupo. Al girar en Unquera cogemos referencias con el grupo de cabeza integrado por Felipe, Guillermo Ruiz, Barroso y Asier Astigarraga. Nos llevaban sobre 2 minutos... mala señal.

Los 10 kms de vuelta hacia San Vicente fueron con el viento en contra. Ahí fue donde tuve que asumir la responsabilidad y ponerme a tirar, pero claro, cuando tiras tú solo lo pagas y si los que van detrás están frescos, peor todavía. Así, en el inicio de la subida, sucedió lo que sabía que iba a suceder... ataca Pello, ataca Manzaneda, se escapa, ataca Berto, se escapa, ataca Marcos, se escapa, ataca Sobrino, se escapa, ataca Emilio, se escapa... Me es imposible salir a los ataques y sigo a mi ritmo, cediendo unos 30 segundos con el grupo... Es lo que hay y ya lo sabía, la estrategia del Buelna estaba saliendo a la perfección y yo, sin embargo estaba completamente solo, sin nadie que me ayudara. En ese momento me di cuenta de que, pese a ser un deporte individual, tener un  equipo de te eche un cable es muy importante (¡Cómo te echo de menos Félix!). Aún así, mi equipo me aporta muchas otras cosas y sus ánimos siempre son un plus, me siento querido, y para mí, eso es mucho más importante que ganar el circuito.



Volviendo al tema, llego a boxes junto  a Edu, compañero de viaje en Barakaldo y también hoy, a 30 seg del grupo con el que fui en bici, me cambio rápido y salgo volando para remontar hasta donde pueda. Nada más salir me cantan 2 min 30 seg con Felipe... puff  imposible, esta vez no va a ser. Aún así no me vengo abajo y me marco metas más cercanas. Primero adelanto a Sobrino, luego alcanzo a Emilio y a Marcos, quien me sigue durante 600 metros. Me siento cómodo, quizás demasiado, pero al ver a lo lejos a Pello Osoro, sub 23, se me vuelve a encender la vena competitiva y me lanzo a por la victoria en mi categoría. Ya habíamos coincidido en Suances donde me costó ganarle, superándole en el último km. Esta vez, en el km 3,5 le paso y me pongo 5º y primero de mi categoría. Por delante... la NADA... El cuarteto de cabeza liderado por Barroso estaba muy lejos, demasiado. Apreto  en la última subida, llego a San Vicente y con zancada alegre cruzo la meta 5º y 1º Sub 23, marcando, probablemente, el mejor parcial a pie. También era campeonato universitario en el cual me llevé la plata por detrás de Felipe y por delante de Rumayor.



Satisfecho, muy satisfecho de mi carrera, he hecho lo que he podido y he bregado yo solo contra el mundo, no había otra opción, así que ese puesto me sabe a gloria. Cuando lo das todo y no hay más sólo queda felicitar a los que han sido mejores, así que Felipe y Guillermo ¡"Chapeau"! por vosotros.



No quiero despedir la crónica sin dar la enhorabuena a Omar, que por fin terminó un triatlón, y lo hizo con la misma ilusión que lo empezó. Espero que este sea el primero de muchos y le anime a seguir entrenando duro para superarse.



¿Y cómo queda el Circuito Caja Cantabria? Tachán!!! Muy, muy emocionante, nos lo vamos a jugar Felipe y yo en la última carrera en Santander, quien entre delante gana el Circuito. Guillermo, al entrar hoy detrás de Felipe ha perdido la opción de ganarlo aunque todavía puede ser segundo si gana a Felipe y yo también lo hago.



Va a estar difícil, muy difícil, y sobre todo visto lo ocurrido hoy, Felipe tiene un equipo que le ha echado un buen cable hoy al no pasar a relevos en el grupo (totalmente comprensible jeje) y dejarme a mí toda la responsabilidad. Sólo me queda rezar para que en Santander tenga a alguien en bici que colabore conmigo y así evitar que se vaya mucho en bici... pero bueno, no le voy a dar más vueltas, lo que tenga que ser será.


¡Que gane el mejor! ;)


Gracias  Vanesa y a Pablo por las fotos ;)