domingo, 19 de marzo de 2017

DUATLÓN DE OVIEDO 2017: Contraste de sentimientos. Circuito precioso, seductor, pero peligroso

Este año, con el cambio de Presidente en la Federación Asturiana de Triatlón, parece que las cosas se están haciendo mejor y con más mimo. Prueba de ello está en el esfuerzo que se está haciendo por organizar un circuito de Duatlón, Triatlón, Duatlón Cross y Acuatlón súper completo y lleno de pruebas nuevas ¡Enhorabuena y gracias por ello!  Entre ellas se programó este fin de semana el Duatlón de Oviedo, Campeonato de Asturias de la modalidad. Siempre es un lujo correr en casa, ya sea en la San Silvestre, en los 10 kilometros o en un duatlón. En este caso la novedad de la prueba residía en su ubicación, en pleno centro de la ciudad, con los boxes en el Paseo Los Álamos, frente a la Escandalera, mismo escenario que la salida y la meta, y circuitos que recorrían el corazón de "Vetusta".

Sonrisa forzada antes de empezar (Foto: Luis Cue)
Con mucha ilusión me inscribí a esta prueba, pero el día no empezó de la mejor manera. Fue mañana de "orbayu" en la capital asturiana, lo que unido al ratonero y deslizante circuito ciclista, hacían de este sector un verdadero peligro. Los más duchos sobre las dos ruedas se frotaban las manos, los más torpes, como yo, llegábamos timoratos a línea de salida.

No me gusta sentirme derrotado antes de empezar, pero si algo tengo claro desde que empecé a practicar este deporte, es que no pienso poner en riesgo mi integridad física dentro de lo que yo pueda controlar. Hoy, la de Oviedo era una carrera que me gustaba: duatlón sprint, con drafting, y grandes rivales con los que batirse el cobre. Además llegaba en un gran momento de forma, con muy buenas sensaciones entrenando y ritmos que van mejorando día a día y con ganas de plasmarlo en un buen resultado. Sin embargo, esas condiciones para la bici me hicieron pensar más allá de la propia competitividad que llevamos dentro los triatletas, y con la mente fría darme cuenta de que no era un día para arriesgar. Intentaría salir en el primer 5000 con los primeros, llegar a boxes con un buen calentón, pasar la bici sin percances, y luego correr un último 2500 con todo lo que tuviera.

A las 10:30 am fuimos llamados por orden de dorsal a línea de salida... ¡Primera en la frente! Yo tenía el dorsal 207, así que cuando llegué a colocarme al arco de salida me vi atrás del todo, y sin posibilidad de avanzar puestos. Todos quieren tener buena posición en carreras tan cortas y explosivas, así que no me quedó otra que resignarme y salir en vagón de cola.

No busquéis que no se me ve... jejeje  (Foto: Luis Cue)
Bocinazo al aire y como sardinas enlatadas fuimos pasando por el embudo del arco azul de salida. Cincuenta metros de trote hasta la primera curva cerrada y estrecha a la derecha, y empezamos a serpentear por el Parque San Francisco. Voy muy retrasado y no encuentro huecos para avanzar hasta que no coronamos en la parte alta del Parque, en el paseo paralelo a Santa Susana. Hemos recorrido ya 800 metros, y al levantar la cabeza para situarme , atisbo la cabeza de carrera unos 100 metros por delante, con el corredor Internacional con Barhain y sexto del mundo, Karich Moussa, liderando un grupo muy estirado. No hay cortes, pero esos 100 metros perdidos me matan.

Fui "telonero" en la salida  (Foto: Luis Cue)
Contrariamente a lo que suelo hacer para avanzar posiciones (pegarme un calentón rápido para enlazar) decido ir poco a poco progresando, sin obsesionarme, y a ritmo. La táctica funciona, pues antes de empezar a bajada hacia el Paseo Los Álamos y encarar el primero de los dos pasos por meta, ya había conseguido contactar con cabeza de carrera. Momento en el cual Karich empezó a tensar la cuerda y en el grupo nos quedamos unos pocos: Bayón, Barroso, Zapico, Lionel, Ciro, Diego Martín, Aurelio y yo mismo. Las sensaciones eran buenas y al inicio de la segunda vuelta ya me coloqué detrás de Karich, junto a Bayón. Quizás me hubiese venido bien un poco más de ritmo en este segundo giro. Viniendo desde atrás y pese a la "mini" remontada de cien metros que tuve que hacer, me veía con fuerza para tirar un poquito.


Paso por la primera vuelta. Ahora sí me podéis buscar  (Foto: Luis Cue)
Juntos, este grupo de unos diez corredores, completamos la segunda vuelta al exigente, pero corto, circuito sube y baja por los caminos interiores del Parque San Francisco. Se avecinaba la debacle. ¡Qué pocas ganas de subirme a la bici!

Llegamos a la transición y Karich, que tenía la bici justo dos puestos delante de mí, se despista un poco y se frena antes de tiempo, quedándome liegramente taponado y teniendo que indicarle que siguiera hasta donde teníamos las bicis, gesto que me agradeció a final de carrera y por el que a mí también me ha ganado este chaval. Ser sexto del mundo Elite, correr en Oviedo y valorar gestos como este venidos de un pipiolo como yo es de agradecer y dice mucho de su persona. ¡Un crack!

T1 detrás de Dani Bayón, Campeón de Asturias hoy en Oviedo  (Foto: Luis Cue)
Hago una transición más o menos buena y me subo a la bici con Bayón y Karich. Estoy en la pomada, pero tengo los segundos contados. Exactamente los mismos que tardamos en llegar al primer giro de 180 grados. "Suelo mojado + pintura de pasos de cebra en el asfalto = No te la juegues que te la pegas". Y ahí se terminó mi carrera. En ese primer giro vi alejarse a Karich, Barroso (que había hecho una súper transición y consiguió unos metros de ventaja al principio del segmento ciclista), Bayón, Aurelio, Diego y Ciro. Me quedé más solo que la una, con 5 vueltas que dar al Parque San Francisco, entrando en cada una de ellas por Fruela, Pozos y giro peligroso hacia el adoquinado de la calle del edificio viejo de la Universidad (San Francisco).

Empieza la sangría...  (Foto: Luis Cue)
Aprieto, y en la subida de Toreno  a punto estoy de contactar de nuevo con cabeza de carrera, pero pronto el panorama se torna feo, empieza la bajada y el curveo y los pierdo de vista. Antes de terminar la primera vuelta llegan por detrás Zapico y Toñín, que me pillan despistado al inicio de la subida a Santa Cruz. Me sacan 50 metros en los primeros 100, ¡van como aviones! pero son la excusa perfecta para apretar el culo, consiguiendo pillarles justo al coronar en Santa Susana. Y se repite la historia, duro con ellos lo que tarda la carretera en ponerse cuesta abajo. Los pierdo en el giro de derechas hacia Toreno y me vuelvo a quedar solo.

¿Cuántes vueltinas queden oh?  (Foto: Luis Cue)
Dos grupos perdidos en la primera vuelta, y quedan 4... ¡qué sangría! Sigo pensando que lo mejor en no jugársela, y completo tranquilo la segunda vuelta, al final de la cual me pillan Jorge Granda, Eloy, Giraldo y Jorge Blanco. No llevan el ritmo de los primeros grupos, pero van demasiado fuerte para mí en las curvas. Aún así, y pese a ir quedándome en cada bajada, consigo siempre contactar en las subidas y en el llano de Santa Susana. Me entretengo en este juego del gato y el ratón, y voy haciendo la goma las tres vueltas restantes. Procuro, al menos, exigirme subiendo, y siempre con una cadencia alta, consigo recuperar metros con mis predecesores. Además, las sensaciones cuando la carretera se pone hacia arriba son muy buenas, así que si consigo llegar vivo a la T2, habré cumplido con la premisa de llegar sano y salvo y haber metido algo de calidad para el cuerpo.

Llegamos a la segunda transición y me bajo en el puesto 13, sin opción a nada más que a maquillar un resultado discreto en un día en el que no me atreví a rendir al nivel que tengo. Empiezo a correr a ritmo, y a los 500 metros ya había pasado a mis compañeros de bici, colocándome noveno. Por delante había un mundo con los del grupo de cabeza, pero mi idea era la de hacer un buen parcial a pie, independientemente de las opciones de pillar a alguno de ellos, así que seguí tirando y tirando hasta que, a falta de 400 metros contacté con Zapico y Toñín Suárez. De ahí a meta solo quedaba bajar por la paralela a Toreno, giro a la derecha y toda la recta del Paseo Los Álamos. Me lanzo hacia abajo. Toñín lucha por cambiar, es un guerrero bueno y no me puedo fiar, pero cuando curvamos para enfilar los 200 metros llanos hasta la meta, me quedo solo y cierro un parcial más o menos digno en un duatlón que no fue lo que me hubiese gustado, pero que tampoco me deja mal sabor de boca.

Voy jodido, aunque no lo parezca ¿eh?  (Foto: Luis Cue)
Segundo mejor parcial a pie en el segundo segmento, solo superado por Karich, que ganó la carrera y corrió unos 10 segundos más rápido que yo esta última parte. Me hubiese gustado bajarme de la bici metido en la pomada y haber podido disputar a Bayón, Barroso, Diego, Aurelio y Ciro, ese segundo puesto tan reñido, pues el primero ya tenía, nacionalidad, apellido y nombre: Barhain, Moussa, Karich
Y con este calentón cerramos una semana más y una semana menos para los siguientes objetivos. La próxima cita será en 7 días en Santander, con el Duatlón de mi segunda casa, y después empieza el baile por el que estoy entrenando duro día a día. Pero vamos a seguir la mentalidad "cholista" de "partido a partido" y pensar solo en la siguiente.

Saludos a todos y gracias a los que os acercasteis a vernos en esta mañana gris, típica asturiana.

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